Hay días que pasan como en un sueño, un sueño tedioso en el que cada lunes, o cada martes, transcurre de la misma manera. Te levantas, te alistas (por que no te arreglas, no hay tiempo), levantas a los demás, desayunas, vamos a la escuela y regresas a los pendientes de la casa. Los fines de semana no son tan diferentes, sólo que no hay salida temprano al colegio.
Para los adultos la rutina mata, aburre, hastía. ¿Cuántos libros o citas se han escrito para que salgas y "vivas"? Normalmente sobrevivimos al día a día, cansados de lo mismo: la rutina del trabajo (tanto fuera como de casa), los mismos problemas, las mismas noticias negativas.
¿Como vivir, "vivir" en un mundo lleno de intolerancia y de violencia? ¿Cómo asegurar la felicidad de los tuyos? ¿Cómo encontrar la felicidad de tu interior cuándo desde afuera el mundo se desmorona? En realidad la mayoría de la gente quiere lo mismo: felicidad, pero todos tienen los mismo miedos: inestabilidad emocional y económica y ser aceptado socialmente.
Los cristianos buscan a Dios para llevarlo a todos lados y anteponiéndolo en todo lo que hacen todos los días, porque "Si tienes a Dios, nada te falta." No lo sé... Los budistas meditan para encontrar la paz interior. Hasta el pseudo gurú César Lozano te dice "no es lo que te pasa, si no cómo reaccionas a lo que te pasa". ¡Súper, se murio... se enfermó (inserte aqui parentesco), me robaron, pero soy bien feliz! IM-PO-SI-BLE. Para ser feliz el medio ambiente, las personas que te rodean y la sociedad en la que vives tiene que aportar un poquito, un mínimo rayo de luz para poder sacar el cuello y respirar un momento.
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