Y efectivamente. Ayer fue una tarde un tanto peculiar. Desde que salimos de la casa decidimos irnos en el carro y no en la camioneta, para gastar menos gas, etc... Cuando ibamos llegando nos encontramos con una calle cerrada porque estaban haciendo reparaciones en los postes de energía eléctrica. Nos regresamos, tomamos la calle Morelos y ¡oh, sorpresa! Esa calle también estaba cerrada... nos quedamos al rededor de 20 automóviles atorados ni pa'atrás ni pa'delante. A se bajó del coche, investigó que pasaba y además les pidió a los demás automovilistas que se fueran de reversa, fácil más de 50 metros... es mucho de reversa!
Total, otro camino... como 20 min en terracería, fue mucho para mi carrito año 2002. Llegamos sanos y salvos, pero a la hora de regresar, en la carretera... "Prendió un foquito y está temblando mucho" y yo pensé: "oh, oh, se va a descomponer otra vez". Y dicho y hecho nos quedamos en el km 259 de la carretera nacional y tuvimos que esperar al rededor de 1 hr que viniera la grúa. Además de eso, había un accidente un par de kilómetros más adelante por lo que se empezó a hacer un grotesco embotellamiento. Llegó la grúa y nos trepamos junto con el chofer, un chofer amarguetas y malhumorado por cierto que ni siquiera se ganó su propina... allá él.
¿Qué cosas no? Muchas veces he visto a los ángeles viales y ahora, ni sus luces... Mi carro está fuera de la casa y nosotros dormimos bien.